Estudiar zoología es algo muy raro, tiene cosas guays pero también muy absurdas como aprender cómo zumban diversos bichos, y en algunos casos es algo... sorprendente. Porque claro, cuando no tienes pene hay que ponerse creativo a la hora de transmitir tu esperma. Por ejemplo: los nematodos (un grupo de gusanos cilíndricos) se aparean alineando sus conductos reproductores de una forma especial, el macho se enrolla al cuerpo de la hembra (ellos tienen los conductos en la parte final del cuerpo mientras que las hembras suelen tenerlos en el medio), pero claro, se necesita un mecanismo para que no se puedan escurrir o cualquier cosa, y esto lo subsanan mediante otro sistema de acople: los machos tienen unas espinas copulatorias que los ayudan a anclarse a las hembras. Otro caso curioso de apareamiento son las lombrices. Las lombrices son animales hermafroditas, es decir, no hay machos ni hembras. Por tanto, para favorecer el intercambio genético se aparean entre ellas aunque realmen
Divulgación, ciencia y humor. ¿Si no podemos confiar en la ciencia qué nos queda?